LOS CINCO SECRETOS

Uno de los editores destacados del siglo XIX y autor de varios clásicos relacionados con el Taijiquan fue el Sr. LI YIYU 李亦畬 (1832-1892). Destacado en el Arte, era sobrino y discípulo de Wu Yuxiang 武禹襄, quien aprendió taijiquan de Yang Luchan 楊露禪 y de Chen Qingping 陈清萍.

Entre los libros que escribió destacaron el «Wu Zi Jue», «Zou Jia Da Shou Xing Gong Yaoyan», «Zhang Fan Mijue» y el «Taiji Quan Xiaoxu». Su hermano Li Qixuan, también colaboró con la leyenda de esta familia de practicantes y escritores, con las obras «Fu Zi Jue» y «Ge Shi Baihua Ge».

Tanto los hermanos Li como su tío Wu, remontan los orígenes del Taijiquan al Maestro Zhang San Feng en Wudang. Li YiYu comenta que un practicante de Taijiquan debe desarrollar y preservar cinco cualidades principales. Dice Li:

1 xin jing

La mente (xin) siempre debe aquietarse. De lo contrario uno no puede concentrarse y al alzar el brazo, moverse hacia adelante o atrás, izquierda o derecha, faltará enfoque a la dirección. Es por lo tanto indispensable aquietar nuestra mente. Al iniciar un movimiento, no
podrás controlarlo por ti mismo. Debes aquietar la mente y comprender con el cuerpo. Tus movimientos acompañan a los del adversario. Cuando el otro se pliega, uno se extiende sin desconectarse ni resistir. No te extiendas ni retrocedas por cuenta propia. Si mi adversario tiene li (fuerza bruta), yo también lo tengo, pero el mío se le anticipa. Si mi adversario no tiene li, yo tampoco, pero mi mente sigue anticipándosele. Es necesario estar siempre alerta; dondequiera se nos toque, allí debe ir la mente. Debes descubrir la información mediante la práctica de no desconectarte ni resistir. Sigue este método y en un año o medio año, lo desarrollarás instintivamente en tu cuerpo. Todo esto quiere decir que debes usar la mente (yi), no la fuerza (li). Con el correr del tiempo seré yo quien controle al adversario, no él a mí.

Tuishou Spain
2 shen ling

Si el cuerpo es torpe uno no puede avanzar o retroceder como quiere. Por ello, el cuerpo siempre debe ser ágil. Una vez que eleves un brazo no puedes perder vivacidad. En el preciso momento en que el adversario toca mi piel o mi pelo, mi mente ya está penetrando sus huesos. Al alzar los brazos, mi Qi se enhebra por todo el cuerpo. Si el lado izquierdo está pesado, se vacía, y mi el brazo derecho está respondiendo. El Qi es como una rueda y todas las partes del cuerpo deben coordinarse entre sí. Si alguna parte queda descoordinada, el cuerpo queda desordenado y debilitado. El defecto siempre ha de encontrarse en la cintura y las piernas. Primero la mente sigue al cuerpo. Acompaña al adversario; no te sigas a ti mismo. Cuando sólo te sigues a ti mismo, tu movimiento es torpe, pero cuando acompañas al adversario, es vivaz. Cuando puedas seguir al adversario, tus manos podrán distinguir y sopesar con precisión la magnitud de su fuerza midiendo la distancia de su aproximación sin errar por un solo pelo. Avanzando o retrocediendo, todo será perfecto. Cuanto más tiempo dediques a este estudio, más refinada será tu técnica.

Tuishou_Spain_2
3 qi lian

Si el Qi está disperso y no se acumula internamente se desperdiga con facilidad. Deja que el Qi penetre en tu columna y que la inhalación y exhalación sean suaves e ininterrumpidas, llenando todo el cuerpo. La inhalación cierra y recoge, la exhalación abre y descarga. Así como la inhalación puede naturalmente alzar y desarraigar al adversario, con igual naturalidad la exhalación puede bajar y despedirlo (fa fang). Esto se logra dirigiendo el Qi con la intención (yi), no con la fuerza (li).

Luohantang_Taiwán_1
4 jin zheng

Con la práctica, el jin del cuerpo se convierte en una unidad. Distingue con claridad lo sustancial y lo insustancial. Para descargar energía (fajín) es necesario estar enraizado. El jin asciende desde el pie, es dirigido por la cintura, se manifiesta en los dedos y es proyectado desde la espalda y la columna. Debemos elevar por completo el espíritu en el preciso momento en que el jin del adversario está por manifestarse pero no ha sido descargado. Así, mi jin se ha encontrado con el suyo, ni tarde ni temprano. Es como usar yesca para encender un fuego o como una fuente que surge. No debe haber el menor desorden ni al avanzar ni al retroceder. Aunque sientas como si tu piel ardiese o si te vapuleara un torrente, no debes perturbarte en lo más mínimo. En la curva busca la recta, acumula y luego descarga. Así podrás seguir a tus manos y lograr un resultado ventajoso. Esto se llama tomar prestada la energía del adversario o disipar una fuerza de 500 kilos con 100 gramos.

Luohantnag_1
5 shen ju

Habiendo asimilado los cuatro caracteres anteriores, todo se resume en concentrar el espíritu. Si el espíritu está concentrado, el Qi circula sin impedimentos. La esencia vital y el Qi vuelven al espíritu (shen) y el Qi se manifiesta en agilidad. Con el espíritu concentrado, el abrir y cerrar ocurren en la secuencia apropiada y la distinción entre lleno y vacío es clara. Si la izquierda está vacía, la derecha está llena y vice-versa. Vacío no quiere decir carente de toda fuerza. Lleno no quiere decir colmado por completo. Simplemente el espíritu debe estar concentrado: los focos críticos son la mente (xin) y la cintura, no la fuerza externa (li).

Al no estar fuera ni separada, la energía (jin) se toma prestada del adversario y el Qi se descarga desde la columna. ¿Cómo puede descargarse el Qi desde la columna? El Qi desciende desde los hombros, se recoge en la columna y se derrama desde la cintura. Cuando el Qi se mueve desde arriba hacia abajo, se llama cerrar. Desde la cintura el Qi asciende por la columna, se extiende a los brazos y se usa en los dedos. Cuando el Qi se mueve de abajo arriba se llama abrir. Cerrar es recoger, abrir es descargar. Cuando reconoces el abrir y cerrar, conoces el yin y yang. Al llegar a este nivel tu pericia mejorará de día en día. Progresivamente llegarás al punto en que podrás actuar a tu albedrío.

Luohantang_Taiwán

Deja un comentario